Los de Mariano Ortega supieron sufrir para terminal batiendo a un rival que ganaba por dos goles de diferencia a 8 minutos para la conclusión
El Tubos Aranda Villa de Aranda quería dar un golpe encima de la mesa en el encuentro que le midió al Unión Financiera Oviedo, y lo consiguió. Los amarillos superaron a su rival por 27-30, consiguiendo de esta forma distanciarse en 3 puntos de la quinta plaza.
El encuentro estuvo repleto de alternativas. Saltó mejor a la cancha de Vallobin el Tubos Aranda, y gracias a un parcial de 2-6 cuando aún no se habían cumplido los 6 minutos de juego, hacía encender las alarmas en el equipo carballón, obligando a Ricardo Margareto a solicitar su primer tiempo muerto.
Los locales supieron reaccionar, consiguiendo dar la vuelta a la contienda 8-7 a los 12 minutos.
Tras una tremenda igualdad entre las dos escuadras se llegaba al término de la primera mitad con 16-17 en el electrónico. Un marcador muy alto, para los guarismos que llevaba manejando Oviedo en la División de Honor Plata.
Tras la reanudación, Oviedo puso sus cartas encima de la mesa. Tanto fue así que los azulones conseguían marcharse en el marcador 23-20. Mariano Ortega quería parar la sangría, y su tiempo muerto tiempo tuvo su efecto.
El equipo apretó en defensa, y con la salida a pista de Luis de Vega, comenzó a ser un muro en defensa. Varias posesiones para conseguir la igualada con 23-22 en el marcador. Hasta que apareció el portero leones en el Tubos Aranda. Varias acciones consecutivas del guardameta, incluido un 7 metros que consiguió detener, sirvieron para que los amarillos despertaran.
24-24 y 15 minutos para el final, o lo que es lo mismo, nuevo partido.
Fue entonces cuando los de Mariano Ortega fueron superiores a su rival, aunque no sin sufrimiento, porque Oviedo en su último arreón conseguía poner el 26-24 a 8 minutos para la conclusión. El Tubos Aranda no se puso nervioso, y gracias a las paradas de Luis de Vega, incluido un pase a Alberto Gonzalez con el que los amarillos se ponían 26-27, supo maniatar a su rival con un Alberto G. Pinillos descomunal. El central arandino con tres tantos consecutivos hundía a su rival, para dar la victoria a su equipo por 27-30.
El próximo compromiso de los arandinos será el próximo sábado 26 de noviembre a las 19:00 horas frente al Balonmano Alcobendas. Otra final para los de Mariano Ortega para asentarse en las cuatro primeras plazas del grupo A de la DHPM.
FICHA TÉCNICA:
Unión Financiera Base Oviedo (27): Fede Wermbter, Raúl Blanco, Pablo del Rincón (3), Gonzalo Carou, Paulo Vinicius (4), Rubén Rozada (5), David Ortega (3) –siete inicial- Juan Echevarría, Vladyslav Parovinchak (5), Nacho Huerta (2), Matheus Pereira, Fran Revuelta, Jaime González, Sergio Sarasola (4), Jayro Pérez (1) y Yailán Hechavarría.
Tubos Villa de Aranda (30): Magnol Suárez, Mauro Jaureguiberri (1), Alberto González (6), Alberto González (3), Javier Domingo (3), Álex Berbel (5), Pablo Herranz (3) –siete inicial- Luis de Vega, Ander Iriarte (2), Víctor Megías, Marcos González (1), Guillermo Fischer, Alberto Montiel, José Gregorio Palacios (6), Víctor Deco y Víctor Enebral.
Árbitros: Enrique Pérez González y Luis Díaz-Flores Gómez-Calcerada. Amonestaron al entrenador local Ricardo Margareto y al jugador visitante Pablo Herranz. Excluyeron por dos minutos a los locales Pablo del Rincón, Gonzalo Carou y Sergio Sarasola y a los visitantes Ander Iriarte, Guillermo Fischer y José Gregorio Palacios.
Marcador cada cinco minutos: 2-5; 6-7; 8-9; 11-12; 14-15; 16-17; -descanso-; 19-19; 23-20; 23-22; 24-24; 26-27; 27-30.
Polideportivo Vallobín: Unos 450 espectadores.